El acusado fue sorprendido por Aduana en dos oportunidades ingresando a zona franca mercadería con reproducciones no autorizadas de conocidos personajes como Peppa, My Little Pony, Winnie the Pooh y Minecraft, entre otros.
Por los delitos de internación de obras ilícitas y contrabando fue condenado un usuario de zona franca sorprendido por Aduanas en los años 2016 y 2017, ingresando al país en forma ilegal juguetes que simulaban ser de personajes conocidos y pertenecientes a marcas como Lego y Disney, entre otras.
El fiscal Eduardo Ríos, de la Unidad de Delitos Económicos de la Fiscalía Regional y a cargo del caso, explicó que en septiembre del año 2016, funcionarios de Aduana realizaron un aforo físico a una mercadería adquirida por el acusado Luis Alberto Chila Arancibia, representante legal de la empresa Inversiones Chile Hermanos Import. Export, Ltda, que se describía como “Jgte. Animal Marca: S/M y Juguete Caballo C/ Accs. Marca: S/M”, verificando que se trataba realmente de casi 14 mil unidades de juguetes con reproducciones no autorizadas de conocidos personajes como Peppa Pig y My Little Pony, todas creaciones de las empresas Entertainment y Hasbro.
De igual forma, en enero de 2017, funcionarios de Aduanas realizaron nuevamente un aforo a otra mercadería del mismo usuario que iba con destino a zona franca, rotulada como “Jgte. Didáctico Marca: S/M”, verificando que se trataba de cinco mil unidades de juguetes de bloques plásticos con reproducciones no autorizadas de personajes animados como Friends, Minecraft, Duplo y Winnie the Pooh, que son creaciones de las empresas Lego y Disney.
Ambas mercadería tenían un valor aduanero total de 45 millones de pesos. A juicio de la Fiscalía, estos hechos constituyen dos delitos de internación de obras ilícitas y dos delitos de contrabando.
En un juicio simplificado, el juzgado de garantía resolvió condenar al acusado Luis Alberto Chila Arancibia a dos penas de 61 días de presidio y multa de 12 UTM por el delito de internación de obras ilícitas, y dos penas de 41 días por el contrabando, además del comiso de la mercadería.
Esta es la primera condena que se logra por los delitos señalados en relación a productos Lego.